Las insistentes lluvias de toda la mañana no pudieron restar cuantía ni entusiasmo a unos 450 niños y niñas que este lunes 1 de julio asistieron a la apertura del Campamento de Béisbol de Verano del Club Atlético Licey.
Acompañados por el padre, la madre o algún responsable, bajo un “aguacero”, en uniforme azul y equipado con las bateras o bultos recibidos durante la inscripción previa, los infantes de 5 hasta 16 años llegaron a las instalaciones de los Tigres del Licey, lado izquierdo del Estadio Quisqueya, como se había establecido, antes de las nueve de la mañana.
Visto en el espejo del gran éxito del Licey Summer Camp en la primera versión (2012), decenas de niños y sus padres no tuvieron la oportunidad de inscripción solicitada, por haberse agotado el cupo establecido de participantes, por lo que el presidente del Club, licenciado Miguel Guerra Armenteros, expresó sus formales excusas por no poder complacerlos a todos.
Fernando José Ravelo, de la Oficina de Operaciones de Béisbol de los Tigres, ofreció la bienvenida formal a los participantes en el clubhouse, a nombre del glorioso equipo del béisbol profesional dominicano, del patrocinador Pepsi y de las empresas que apoyan, como Malta Morena, La Sirena, Banco Popular Dominicano, Gatorade y jugos Tampico.
Los infantes fueron agrupados de edades de 5 a 8, de 9 a 12 y de 13 a 16 años, que de inmediato fueron a recibir instrucciones de bateo a cargo del cuerpo de coaches del Licey, encabezados por los retirados peloteros de Grandes Ligas José Offerman, Silvestre Campusano y Carlos, así como su hermano Vladimir Pérez y Héctor Tatis.
Las decenas de niñas participantes se iniciaron en tareas de manualidades y baile, pero en el transcurso de las tres semanas de duración (hasta el día 19), aprenderá
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